¿Es mejor montar tu infraestructura de datos on-premises o cloud?

Reading Time: 3 minutes

¡Hace unas semanas estuvimos charlando sobre las diferencias entre Data Warehouse, Data Lake y Data Lakehouse, y cómo cada uno puede ser la clave según lo que necesite tu empresa! Ahora, queremos darle una vuelta a una pregunta que siempre aparece en el mundo del data management: ¿Qué es mejor para nuestra infraestructura de datos, montarla on premises o en la nube? 

El modelo on premises ofrece algunas ventajas esenciales que pueden resultar muy atractivas para ciertas empresas.


En primer lugar, proporciona control total sobre la infraestructura, lo que permite personalizar y gestionar cada aspecto según las necesidades específicas de la organización. Además, la seguridad es una de las principales razones por las que muchas empresas optan por este modelo, ya que pueden implementar sus propios sistemas de protección adaptados a los estándares requeridos. Esto también se extiende a la capacidad de cumplir con normativas estrictas, ya que, al tener el control total, las empresas pueden garantizar que están cumpliendo con los requisitos legales sin depender de terceros.

✅ Otro punto a favor es la previsibilidad: al estar todo en casa, no hay sorpresas por cambios inesperados por parte de proveedores de nube. Esto también significa que el rendimiento es constante y controlado, ya que no depende de la calidad de la conexión a Internet ni de factores externos.

⚠️ Sin embargo, también existen desafíos asociados con este modelo. Uno de los mayores inconvenientes es el alto coste inicial, ya que montar toda la infraestructura y adquirir el hardware necesario puede suponer una inversión significativa. Además, mantener esta infraestructura requiere mantenimiento constante: actualizaciones, reparaciones y mejoras deben ser gestionadas internamente, lo que implica tiempo y recursos.

⚠️ En cuanto a la escalabilidad, el modelo on premises presenta limitaciones. Si la empresa necesita más capacidad de almacenamiento o procesamiento, esto conlleva nuevas inversiones y ajustes que no siempre se pueden hacer de manera ágil. Por último, este modelo puede ser menos flexible frente a cambios rápidos o imprevistos, ya que cualquier adaptación requiere tiempo y planificación. Y, si la empresa no cuenta con un equipo especializado, mantener la infraestructura de manera eficiente puede convertirse en un reto constante.


☁️ El modelo cloud ha ganado popularidad en los últimos años debido a sus numerosas ventajas, especialmente para empresas que buscan flexibilidad y eficiencia.

En primer lugar, la escalabilidad es uno de sus mayores atractivos: puedes aumentar o reducir tu capacidad de almacenamiento y procesamiento en función de las necesidades de la empresa, sin necesidad de grandes inversiones iniciales en infraestructura. Esto proporciona una flexibilidad única, permitiendo a las empresas adaptarse rápidamente a cambios o picos de demanda.

Otro aspecto relevante es el ahorro de costes. Al optar por la nube, las empresas evitan los gastos iniciales elevados relacionados con la compra de hardware y servidores, y solo pagan por los recursos que utilizan. Además, los proveedores de nube se encargan del mantenimiento y las actualizaciones, lo que libera a los equipos internos de la carga de gestionar la infraestructura. Esto se traduce en un enfoque más eficiente de los recursos, tanto humanos como financieros.

La accesibilidad es también un factor importante: los datos y aplicaciones pueden ser accedidos desde cualquier lugar con conexión a Internet, lo que favorece el trabajo remoto y la colaboración global. Y, por supuesto, los proveedores de nube suelen tener alta disponibilidad y resiliencia en sus infraestructuras, garantizando que los servicios estén disponibles la mayor parte del tiempo, con medidas de seguridad y redundancia para minimizar las interrupciones.

⚠️Sin embargo, el modelo cloud también presenta algunos desafíos. Uno de los principales riesgos es la dependencia de terceros: al confiar en proveedores externos para gestionar los datos y la infraestructura, las empresas pueden verse afectadas por cambios o fallos en los servicios de la nube. Esto incluye la posibilidad de interrupciones en el servicio que, aunque poco comunes, pueden afectar a la disponibilidad de los datos.

⚠️Además, la seguridad y privacidad pueden ser un tema delicado. A pesar de que los proveedores de nube invierten en robustos sistemas de seguridad, algunas empresas prefieren tener el control total sobre sus datos para evitar posibles vulnerabilidades o el riesgo de exposición de información sensible a través de internet.

⚠️Finalmente, a pesar de los beneficios en términos de costes iniciales, el modelo de pago por uso puede generar costes a largo plazo que pueden no ser tan predecibles como se desearía, especialmente si el uso de los recursos de la nube crece inesperadamente.

CONCLUSIÓN

La elección entre on-premises y la nube depende de tus necesidades específicas. Ambos modelos tienen ventajas, pero la clave está en evaluar factores como control, seguridad y costes.